Dolor de garganta. Dolor muscular. Tos irritante. No deje que los gérmenes le arruinen el día. Aquí encontrará algunas formas de evitarlos y proteger a los que le rodean.
¡No es muy tarde para vacunarse contra la gripe! Todos los mayores de 6 meses deben vacunarse anualmente contra la gripe. Recuerde que también debe estar al día con las vacunas COVID-19. Los refuerzos actualizados ahora ofrecen protección contra las variantes recientes. Encuentra las vacunas aquí.
Simplemente lavarse las manos con regularidad puede evitarte los gérmenes. Lave sus manos cada vez durante 20 segundos. Un consejo: canta una estrofa de tu canción favorita mientras lo haces por el tiempo recomendado. También es una buena idea desinfectar las superficies de tu casa que se tocan con frecuencia. Obtenga más información sobre la desinfección de superficies.
Hay muchos gérmenes circulando en el ambiente actualmente. Una forma de mantenerse sano es ponerse una máscara en lugares públicos cerrados y concurridos.
Evite salir cuando no se sienta bien. Si no puede evitar salir de casa, lleve una máscara bien ajustada.
Cuando tengas que toser o estornudar, cubre la boca con un pañuelo de papel. Si no tienes uno, usa el codo. Esto ayuda a mantener los gérmenes fuera del aire y de tus manos.
Si te reúnes en un lugar cerrado, aumenta la ventilación y la circulación del aire para que todos estén más saludables. Puede ser tan fácil como abrir una ventana cercana. Más información sobre cómo mejorar la ventilación.
La influenza, también conocida como gripe, es una infección altamente contagiosa que afecta nariz, garganta y los pulmones. La temporada de gripe generalmente se extiende desde fines del otoño hasta principios de la primavera. Cada año en los Estados Unidos, más de 200,000 personas son hospitalizadas por complicaciones de la gripe. Este año está siendo particularmente malo.
La gripe se propaga principalmente a través de gotitas que se liberan cuando alguien tose, estornuda o habla. Con menos frecuencia, las personas también pueden infectarse al tocar algo que tiene el virus de la gripe y luego tocarse la boca o la nariz.
Los síntomas comunes de la gripe incluyen fiebre, tos, dolor de garganta, secreción o congestión nasal, dolores corporales, dolor de cabeza y fatiga extrema.
Si usted o su hijo están enfermos, es mejor quedarse en casa. Debe estar sin fiebre durante al menos 24 horas antes de regresar al trabajo o la escuela. Comuníquese con su proveedor de atención médica para obtener más información sobre las opciones de tratamiento.
El virus sincitial respiratorio, también conocido como VRS, comúnmente causa síntomas leves parecidos al resfriado. Sin embargo, el virus puede ser grave, especialmente para los bebés y los adultos mayores.
Al igual que la gripe, el VRS se propaga a través de gotitas al toser o estornudar. También puede contraer el virus al tocar una superficie infectada (como la manija de una puerta) y luego tocarse la cara.
Los síntomas de VRS incluyen tos, estornudos, secreción nasal, disminución del apetito, fiebre y sibilancias.
Llame a un proveedor de atención médica si usted o su hijo tienen dificultad para respirar, si no beben suficientes líquidos o experimentan un empeoramiento de los síntomas.
Rincón de los padres
Este es un buen momento para asegurarse de que su hijo esté al día con sus vacunas y controles de bienestar. Las vacunas son seguras, eficaces, y ayudan a brindar inmunidad antes de que los niños estén expuestos a enfermedades potencialmente mortales.
Aprende másPrevenga enfermedades graves y protéjase y a sus seres queridos. Ya están disponibles los refuerzos mejorados con protección especial frente a las nuevas variantes.
Verifica si ha llegado el momento de su próximo refuerzo.
¿Tiene preguntas? ¿Necesita hablar en otro idioma?
Llame al Departamento de Salud de Virginia:
877 VAX-IN-VA
(877-829-4682)
Los refuerzos son una parte importante de la protección contra la enfermedad grave o la muerte por COVID-19. Estos refuerzos se recomiendan a la mayoría de las personas. Los refuerzos de COVID-19 actualizados, también llamados refuerzos bivalentes, ayudan a restaurar la protección que ha disminuido desde la vacunación anterior, y brindan una amplia protección contra variantes más recientes. Obtenga más información sobre los refuerzos de COVID-19 y averigüe si necesita uno.
Sí. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomiendan la vacuna COVID-19 para niños solo después de probar exhaustivamente su seguridad en miles de niños. Los niños de seis meses en adelante reciben una dosis de la vacuna adecuada para su grupo de edad. Vacunar a los niños puede evitar que se enfermen gravemente si contraen el COVID-19. La vacunación también da a los padres una mayor confianza para que los niños participen en la guarderia, actividades y la escuela. Obtenga más información sobre las vacunas contra el COVID-19 para niños.
Algunas personas pueden experimentar los efectos a largo plazo de una infección por COVID-19, lo que se conoce como “condiciones posteriores al COVID" o "COVID prolongado". Las condiciones posteriores al COVID incluyen una amplia gama de problemas de salud nuevos, recurrentes o continuos, y pueden durar semanas, meses o más tiempo. Cualquier persona infectada puede experimentar condiciones posteriores al COVID. Las personas que no están vacunadas contra el COVID-19 y se infectan pueden tener un mayor riesgo de desarrollar condiciones posteriores al COVID en comparación con las personas vacunadas.
No existe una prueba para diagnosticar condiciones posteriores al COVID, y las personas pueden tener síntomas que provienen de otros problemas de salud. Esto puede dificultar que los proveedores de atención médica reconozcan las condiciones posteriores al COVID. Los proveedores de atención médica consideren un diagnóstico de condiciones posteriores al COVID con base en un examen de salud y el historial de salud de la persona, incluido si tuvo un diagnóstico de COVID-19 ya sea por una prueba positiva, por síntomas o exposición. Obtenga más información sobre las condiciones posteriores al COVID.
Sí, Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan que todas las mujeres embarazadas reciban la vacuna contra la COVID-19. Los CDC analizaron nuevos datos de mujeres embarazadas que han sido vacunadas y no encontraron un riesgo mayor de pérdida o daño al bebé. De hecho, hay reportes que demuestran que las vacunas mRNA también pueden ayudar a proteger a los bebés lactantes. Además, como las mujeres embarazadas tienen una mayor probabilidad de contraer la COVID-19 grave, si quedan infectadas, existe la posibilidad de que sus bebés nazcan prematuramente. Por ello, vacunarse puede protegerle a usted y a su bebé.
Si usted está embarazada y tiene preguntas, hable con su médico.
Para más información, consulta las preguntas frecuentes sobre la vacunación contra el COVID-19 de los CDC.
Si has estado expuesto recientemente al virus de la viruela símica o tienes un alto riesgo de exposición, la vacuna es una herramienta importante para protegerte. También se recomienda vacunarse a las personas que viven con VIH/SIDA y a las que han sido diagnosticadas de una infección transmitida sexualmente en los últimos tres meses.
Consulta a tu departamento de salud local para saber si eres elegible para recibir una vacuna:
La viruela símica se propaga comúnmente a través del contacto cercano con una persona infectada, particularmente el contacto directo con una erupción o fluidos corporales. También se puede propagar al tocar objetos o telas (como ropa, toallas y ropa de cama) que usa alguien que está infectado. Además, la viruela símica se puede propagar a través del contacto con las secreciones respiratorias.
Una persona es contagiosa desde el momento en que comienzan los síntomas, hasta el momento en que todas las llagas se curan y se forma una nueva capa de piel. Esto suele tardar de dos a cuatro semanas.
Los síntomas generalmente comienzan una o dos semanas después de la exposición al virus, pero pueden comenzar hasta tres semanas después de la exposición. A menudo, las personas primero desarrollan síntomas similares a los de la gripe. Estos síntomas iniciales pueden incluir fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares o de espalda, ganglios linfáticos inflamados, escalofríos, agotamiento y síntomas respiratorios como dolor de garganta, tos o congestión nasal.
Dentro de uno a cuatro días de estos síntomas iniciales, la persona infectada generalmente también desarrolla una erupción. Para algunas personas, esta erupción es su único síntoma. Puede tener el aspecto de granos, bultos o ampollas, y puede ser doloroso o con picazón. La erupción pasa por varias etapas, incluida la formación de costras, antes de curarse. Obtén más información sobre los síntomas.
Cualquiera puede contraer la viruela símica, independientemente de su edad, sexo, raza u orientación sexual. La forma más común de propagación de la viruela símica hasta ahora ha sido a través de la actividad sexual entre personas que han tenido relaciones sexuales con parejas múltiples o anónimas. Además, la mayoría de los casos en el brote de 2022 hasta la fecha han ocurrido en homosexuales, bisexuales y otros hombres que tienen sexo con hombres. Obtenga más información sobre cómo reducir su riesgo en reuniones sociales y a través del sexo seguro.
Se recomienda la vacunación para personas que:
Aprenda los conceptos básicos sobre las vacunas contra la viruela símica.
Hay varios pasos que puede tomar para protegerse, incluyendo evitar el contacto piel con piel con alguien que haya estado infectado con la viruela símica y vacunarse si es elegible. La forma más común en que se ha propagado la viruela símica hasta ahora ha sido a través de la actividad sexual entre personas que han tenido relaciones sexuales recientemente con parejas múltiples o anónimas, por lo que cambiar los comportamientos sexuales para reducir los riesgos, como disminuir el número de parejas y de encuentros sexuales anónimos, también es una medida de protección. Lavarse las manos con frecuencia es siempre una buena práctica de salud pública para la prevención de enfermedades. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) ofrecen más información sobre cómo reducir el riesgo.
La vacunación es otra herramienta importante para protegerse si ha estado expuesto recientemente a la viruela símica o tiene un alto riesgo de exposición.